Harry Potter y la Orden del Fénix
Por Guillermo Solís

Harry Potter y la orden del Fénix es la quinta película de la famosa serie de libros Harry Potter escrita por J. K. Rowling. En esta nueva aventura Harry regresa a Hogwarts para iniciar su quinto año de estudios, pero a su llegada descubre que una gran parte de la comunidad de magos ha sido inducida a creer que la historia del reciente encuentro entre Harry y el malvado Lord Voldemort es una mentira, cuestionando la integridad de Harry. Peor aún es que el Ministro de Magia, Cornelius Fudge, ha nombrado a una nueva profesora de defensa contra las Artes Oscuras, la ambigua profesora Dolores Umbridge. El curso de magia defensiva de la profesora Umbridge, que ha sido “homologado por el ministerio”, no enseña a los jóvenes magos cómo defenderse contra las artes oscuras. Por eso, ante las advertencias de sus amigos Hermione y Ron, Harry decide tomar las riendas en este asunto. En secreto se reúne con un pequeño grupo de estudiantes que se autodenomina “Ejército de Dumbledore” y Harry les enseña cómo escudarse, preparando a los valientes magos para la batalla que está por estallar.

Parece que eso de cambiar director de cinta a cinta no fue sólo cuestión de trabajo de Alfonso Cuarón, sino una tendencia: un segundo inglés, David Yates fue el elegido para dirigir la quinta entrega del mago, reemplazando a Mike Newell, director de la cuarta cinta.

El guionista Steven Kloves, responsable de las cuatro adaptaciones pasadas deja su sitio a Michael Goldenberg, para irse a dirigir (recordemos que Kloves tiene en su haber la dirección de The Fabulous Baker Boys). Como referente de su talento, Goldenberg es el guionista de Contacto.

La novela marca la muerte de uno de los personajes (los fans de la saga sabemos de quien se trata; los que aún no leen el libro, ¿qué están esperando?), de modo que el tono más oscuro (ya iniciado levemente por Cuarón en la tercera parte) aumenta en esta quinta.

Harry Potter y la Orden del Fénix, se podrá ver en tres dimensiones. Imax y Warner Bros han llegado a un acuerdo para que una parte del film -aproximadamente unos 20 minutos- pueda visionarse con la tecnología 3-D. Los minutos de 3-D que se podrán ver en la película se reservan a la parte final, una de las más trepidantes y con más acción de toda la saga.